¿Está preparada tu empresa para reaccionar ante una catástrofe?

El 2017 puede considerarse un año atípico donde se han sucedido de manera simultánea diversos eventos que han afectado a muchas situaciones de riesgo, convirtiéndose en un fenómeno GloCal, donde la afección se deja notar de manera local, y también de forma global. Debemos destacar los eventos de catástrofe natural (CAT-NAT) de los terremotos de México, Huracanes Harvey y Maria en El Caribe y USA, y las graves inundaciones provocadas por el Fenómeno de El Niño Costero en Perú. Adicional al impacto causado por la naturaleza, es mencionable el aumento de ataques Cyber (por ejemplo, WannaCry) que cada vez más se consolidan como forma de manipulación externa en la correcta marcha de las empresas.

Los impactos anteriores se cifran en billones de USD, y las preguntas después de unos eventos o ataques similares suelen ser recurrentes: ¿Estamos preparados para soportar un impacto de estas características? ¿Cómo de robusta es nuestra Cuenta de Resultados? ¿Sabremos reaccionar y responder ante este tipo de eventos en caso de ser afectados? ¿Estamos organizados estratégicamente para la toma de decisión ante crisis de este tipo?

Desde nuestro punto de vista, las herramientas básicas, cada vez más empleadas por las empresas con riesgos “glocales”, son la implementación de Planes de Continuidad de Negocio, las Medidas de Crisis Management y el Emergency Rapid Response. Ahora bien, lo adecuado con exposiciones atomizadas es disponer de un Plan de Continuidad de Negocio que nos permita retomar las actividades con cierta normalidad y minimizar el impacto en la Cuenta de Resultados.

Emergency Rapid Response: Se debe activar en situaciones de emergencia y enfocarse en salvar personas, proteger el medio ambiente y minorar el impacto en los activos de la empresa. Suele ser común la asignación de tareas internas en empleados especializados con el objetivo de desarrollar e implementar dichas medidas.

Crisis Management: De la misma forma que el punto anterior, es recomendable activarlo en el momento de un evento reseñable. Ahora bien, el enfoque queda limitado a la gestión estratégica de la crisis, generando información en tiempo real, y comunicación externa e interna. El comité de Manejo de Crisis evalúa, en primera instancia, el impacto que ha sufrido la empresa y, de acuerdo a ello, activará el Plan de Continuidad del Negocio, de forma parcial o total, en caso de ser necesario.

Plan de Continuidad del Negocio. El principal objetivo es tratar de restaurar la situación precrisis o evento en el menor plazo posible. Su activación suele iniciarse con la aprobación del Comité de Crisis Management. Este plan se encarga de proteger los ingresos, las finanzas y la participación de mercado. Para el correcto funcionamiento de este tipo de herramientas, es necesario realizar una revisión exhaustiva de las exposiciones de riesgo, con un mapeo interno y externo que incluye los servicios y los puntos críticos.

Para disminuir el impacto de los posibles eventos, y recuperar la empresa eficientemente, suele ser necesario que los planes mencionados estén integrados en la compañía, comunicados a todo el personal para que estén atentos a lo que decida el Comité de Manejo de Crisis, y que sean interiorizados por los responsables de levantar procesos críticos.

El aplicar estos planes eficientemente a todo el personal es lo que salva a la compañía del colapso por interrupción de sus operaciones, de daños a la imagen y de tener una percepción negativa por parte de los principales grupos de interés como accionistas o clientes, entre otros.

Por último, debemos indicar que, de acuerdo al avance y gestión de impactos a día de hoy, no parece haber ninguna empresa exenta a este tipo de exposición catastrófica, por lo que consideramos adecuado disponer de las herramientas y protocolos adecuados para minimizar un impacto de características indefinidas, lo que nos puede situar en la cabeza de la diferenciación frente a aquellos competidores sin este tipo de previsión estratégica.