Conciertos y Festivales: cómo gestionar los riesgos en eventos multitudinarios
Las actuaciones musicales son, para algunos, una de las actividades de ocio más esperadas, pues sin duda, el entretenimiento y la diversión están asegurados en este tipo de eventos.
Con la primavera y el verano llegan algunos de los conciertos y festivales más deseados. Se podría decir que en el mes de mayo comenzó en España la temporada musical, y es que Muse, Bruce Springsteen, Adele, AC/DC, Coldplay, y numerosos artistas más actuaron este mes en diversas ciudades de nuestro país. Además, con el verano, los conciertos y festivales multitudinarios al aire libre se sucederán de manera constante.
Este tipo de eventos, al igual que cualquier otro acto multitudinario, pueden acarrear importantes pérdidas y ocasionar siniestros graves.
Gestionar los riesgos y tomar medidas tempranas
“Bruce Springsteen cancela un concierto como protesta contra una ley homófoba”,
“Dron cae sobre la audiencia en un concierto de Muse”,
“Luis Miguel vuelve a cancelar conciertos por su estado de salud”
Estos titulares actuales indican que los conciertos, tienen muchas papeletas de sufrir todo tipo de riesgos, que pueden producirse desde la preparación del evento hasta la finalización del mismo, además de tener grandes repercusiones. Por ello, una gestión adecuada del riesgo y una organización minuciosa del acontecimiento son tareas imprescindibles para contribuir a que la jornada se lleve a cabo con la mayor seguridad posible.
Aunque existen varias coberturas de seguros, las principales para este tipo de eventos son:
- Responsabilidad Civil
- Cancelación por:
- Fenómenos atmosféricos
- Causas de fuerza mayor
- Incomparecencia del artista
- Terrorismo y amenaza
A efectos de la cobertura de Fenómenos atmosféricos es importante el tipo de escenario, la fecha y el lugar de celebración del evento.
La selección de artistas es fundamental a la hora de organizar un concierto, ya que dependiendo de los antecedentes de las estrellas: su reputación, historial de cancelaciones, ficha médica, salud, etc. las coberturas tendrán un coste u otro.
Además, se debe llevar un control del público, un estudio del lugar de la celebración del acto, una correcta disposición del material (escenario, equipo de sonido, etc.), una revisión del pronóstico del tiempo, y además, un equipo de seguridad policial, en caso de que puedan producirse altercados o situaciones de mayor gravedad.
En definitiva, los conciertos y festivales de música no están exentos de sufrir complicaciones, pero si se proporcionan las medidas básicas de seguridad y gestión de riesgos, estos actos pueden generar cantidad de ingresos y tener un impacto positivo en todos los niveles.